Las primeras civilizaciones que habitaron el término de Matapozuelos fueron los Celtas Vacceos, que mantuvieron uno de sus poblados en la unión de los ríos Adaja y Eresma. En este lugar fueron hallados numerosos restos arqueológicos que identificaron la existencia y la importancia del asentamiento. Posteriormente los Celtas Vacceos fueron asediados por el Imperio Romano, el ejército romano continúa la misma ruta que habían hecho los Vacceos y se asientan también en el mismo lugar, poblado de Nivaria y nos dejan como legado la construcción de un puente romano sobre el río Adaja. La situación geográfica convierte al antiguo Matapozuelos en un lugar estratégico. Con el paso del tiempo la población se va trasladando desde el poblado entre los ríos hasta un lugar más amplio y con más recursos para la agricultura y para el ganado; aquí nace el nuevo asentamiento que dará lugar al pueblo. Precisamente la etimología de su nombre se compone de dos partes que aluden a los elementos necesarios para el ganado: “MATA” (porción de tierra cubierta de árboles o vegetación), y “POZUELOS” (abundancia de muchos pequeños pozos de agua). En épocas posteriores con los visigodos y los árabes el poblado, ya en su situación actual, se mantuvo entre los devaneos de las guerras y las migraciones. Es en 1212 cuando por primera vez aparece citado Matapozuelos como Lugar; en la crónica de Ximenez de Rada, cuando enumera a los que acudieron con el rey Alfonso VIII a la batalla de las Navas de Tolosa: “Venían muchos y bien armados haces de hombres con el Señor de Olmedo, distinguiéndose las comunidades de Matapozuelos… que tuvieron tanto valor contra la morisma, que el Rey les dio el dictado de Valerosos y Leales, dándoles por armas las reales de Castilla y la cruz de gules bordada en azur”. Fue en 1560, cuando Matapozuelos dejó de ser Lugar para convertirse en Villa. Entre los siglos XVII y XVIII llegó a tener su importancia dentro de la comarca, con una importante agricultura y el viñedo como base principal de la economía del municipio. En esta época se construyeron los edificios más importantes del pueblo y se vivieron años de prosperidad cultural y social. En el siglo XIX, Matapozuelos se convierte en lugar de paso de tropas francesas en la guerra de la Independencia, y los habitantes del pueblo ofrecen una feroz lucha de resistencia. A finales del siglo XX se produce un nuevo resurgimiento, basado principalmente en una agricultura fuerte y sobre todo en una hostelería innovadora y moderna. En la actualidad Matapozuelos es un pueblo en plena expansión económica, cultural y social.