Considerado por los expertos como el yacimiento íbero más importante de la provincia, este 'oppidum' se ubica sobre promontorio rocoso muy cercano al pueblo. Se trata de un lugar estratégico, un asentamiento que se compone de varias fases: la primera se remonta al período del Bronce Final, un momento orientalizante, otro íbero y por último romano.
En la parte alta del cerro podemos observar restos del lienzo de muralla elaborada con mampostería y restos de muralla de 'opus caementicium'.
La primera fase de dicho asentamiento corresponde al Bronce final e Íbero antiguo, de esta se han encontrado muchos vestigios, sobre todo material cerámico elaborado a mano y a torno, además de restos de edificaciones.
Durante el período Íbero pleno, este asentamiento se rodea de una muralla de piedras de gran tamaño, la cara externa de la cerca se construye mediante piedras y perfectamente careadas. De este período se conserva mucha cerámica y estructuras de viviendas. Durante la época romana, la población de Los Castillejos sufre un gran declive y acaba trasladándose.
Fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) en 2008 como Zona Arqueológica y Patrimonio Inmueble, y, además, está recogido en el Catálogo del Patrimonio Histórico Andaluz.