Este enclave, situado junto al río Sénia a su paso por la misma población, reúne actualmente el contingente industrial más importante del municipio. De hecho, siempre ha sido así, como podemos comprobar con los restos de molinos dedicados progresivamente los cereales, el papel y la electricidad.
El núcleo debía crecer al amparo del Molino de Rossell, al que, cedido por el mismo orden del hospital, pertenecía al común de la población. Por la proximidad física con la Sénia, sus conciudadanos a menudo han empleado y emplean los servicios de la población vecina. El gentilicio es casenc / a.
Actualmente el núcleo tiene censadas unas 70 personas, aunque probablemente hay viven más. Acomodan en unas 45 casas.