Este yacimiento fue incoado Conjunto Histórico-Arqueológico Nacional en 1981 y está situado junto al cruce del camino Santa Pau con el rio Millars. Su estratigrafía abarca desde un primer hábitat inmigrado del Bajo Aragón en el siglo VII a. C. (Hierro), pasando por un periodo colonial fenicio en el siglo VI, hasta la liberación de su población en el siglo V. El poblado fue abandonado en el siglo I volviendo a ser ocupado por los árabes debido a su valor estratégico.