Fue inaugurado el 1 de septiembre de 1859. Se sitúa sobre una isla, llamada Isla de Tapia, unida a tierra por un espigón de 100 metros de longitud como parte del puerto de la citada localidad. Es el único faro del Principado de Asturias ubicado en una isla y el más occidental de la región. Ofrece unas vistas espectaculares de la villa de Tapia de Casariego, de la costa occidental asturiana y de La Mariña Lucense.