Estas vías verdes, antiguos trazados del tren, cuentan con un desnivel poco pronunciado. En Castellón tenemos la suerte de tener una de las rutas a muy poca distancia, la Via verde Benicàssim - Oropesa.

Distancia del recorrido: 5,6Km (11,2Km ida y vuelta)

Tiempo medio estimado: 2:30h (ida y vuelta).

Dificultad: baja.

Folleto pdf de la ruta: folleto ruta verde

Descripción del trazado:

El recorrido comienza con unos pequeños túneles, para a continuación atravesar la urbanización Les Playetes y Torre Bellver, para continuar por la trinchera de la antigua vía hasta llegar a la Torre Colomera.

Esta torre es una construcción que data del siglo XVI y que formaba parte de la red de vigilancia contra los ataques de los piratas Berberiscos, junto a la Torre de la Cordá, la Torre San Vicente en Benicàssim y el Torreón del Rey en Oropesa.

Siguiendo el camino llegaremos a la zona de la costa denominada La Renegá, muy rocosa, abrupta y que mantiene todavía un número considerable de árboles. Más adelante llegamos al largo túnel (aproximadamente 800 metros) que dispone de un sistema automático de iluminación interior.

Al salir del túnel nos encontramos con el puerto deportivo de Oropesa y ya empezamos a ver los primeros edificios de esta población. La vía verde finaliza en un pequeño parque junto a la Playa de la Concha.

Experiencia personal:

He realizado esta ruta multitud de veces, unas veces andando, otras corriendo y otras en bici. Personalmente me parece una de las mejores rutas que tenemos en los alrededores de Castellón (de nivel bajo), el paisaje, que en todo momento bordea la cornisa mediterránea, nos muestra las antiguas calas que antiguamente solo se podían ver desde la ventanilla del tren.

Las torres que nos encontramos también son dignas de mención, una de ellas dispone de una escalera para ser visitada, aunque actualmente los horarios de visita son muy reducidos (Viernes a las 12:00 previa inscripción en la oficina de turismo 964 312 320 o turismo@oropesadelmar.es).

Los túneles, en especial el de 800 metros, son toda una atracción, acostumbrados a pasar por ellos en coche, es toda una experiencia disfrutar de su frescura en los meses de verano o de su cobijo en los meses de invierno.

Cuando llegamos a Oropesa si realizamos la ruta en “plan tranquilo” tenemos un pequeño pinar con unas mesas de madera en las cuales podemos descansar y comer algo que llevemos en nuestras mochilas, otra opción sería andar unos cinco minutos más hasta el paseo de la playa de Oropesa, donde encontraremos multitud de terrazas para tomar algo y reponer fuerzas.

Por Hector Segarra, a 2-8-2016