Si te gusta la naturaleza, no olvides visitar Muniellos, se trata de uno de los bosques más emblemáticos y conocidos de la Cordillera Cantábrica por su belleza y dimensiones 55 km² de bosque y naturaleza. Se encuentra ubicado en el sur occidente de Asturias, dentro del Parque Natural Fuentes del Narcea, Degaña e Ibias. Es sin duda uno de los mejores conservados de Europa y fue declarada Reserva de la Biosfera en el año 2000. Además de robles podemos encontrar otros tipos de árboles como por ejemplo, avellanos, sauces, arces y fresnos. En cuanto a la fauna que habita en esta reserva natural podremos encontrar, si tenemos suerte, osos pardos, jabalís, nutrias, lobos y rebecos.
Al tratarse de un espacio protegido, tiene limitada la entrada por lo que es necesario pedir autorización para su visita, la cual solo se concede a 20 personas al día y por una única vez cada año, por lo que al principio de año la gente solicita las autorizaciones.
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La senda está fraccionada en dos rutas diferenciadas. Si las unes se realiza la circular. Estas dos rutas son: la ruta por Fonculebrera que transcurre por la ladera de la montaña y la ruta del rio que discurre paralela a éste.

La ruta que os vamos a proponer es la ruta del río.

Se trata de una ruta de unos veinte kilómetros aproximadamente en la que vamos a visitar las lagunas glaciares. El recorrido es de una dificultad moderada-fuerte, se recomienda no hacerla con niños. Por otra parte estas rutas solo pueden hacerse a pie, no en bicicleta.

En primer lugar hay que buscar el centro de recepción en Tablizas para pasar por la autorización de rigor y si las necesitamos nos darán indicaciones sobre el recorrido y el tiempo de duración aproximada de la ruta. La zona no está señalizada, pero el sendero es muy fácil de seguir. Empezamos a caminar por la senda del río siguiendo una pasarela de madera donde encontraremos paneles explicativos sobre la vegetación y los animales que podemos encontrar en la reserva. Nos encontraremos con dos desvíos que tienen prohibido el paso, y que coinciden con los arroyos que aportan agua el río. A partir del segundo desvío, caminaremos a orillas del arroyo de la Candanosa.

Después de este puente continuamos por el sendero y después giramos a la izquierda para llegar al lago de La Isla. Siguiendo la ruta, iremos cruzando el río en diferentes momentos primero por puentes de madera y después por puentes más aventureros construidos por troncos. Después de caminar unos dos o tres kilómetros aproximadamente, el camino se va estrechando y se convierte en un sendero ascendente con una pendiente moderada que nos llevará hasta las lagunas. La primera laguna que encontramos es la laguna de La Isla, y después continuamos por el desgüe de la luga, para coger el sendero que nos llevará a la Laguna Honda, que se encuentra 400 metros más hacia arriba con una pendiente bastante pronunciada. Y una vez en la Laguna Honda, encontraremos un sendero casi inapreciable que lleva a la Laguna Grande, aunque para llegar hasta ella hay que caminar un rato campo a través. La última laguna se encuentra a 250 metros aproximadamente de la anterior. Y después el camino de vuelta por el mismo camino.

Os recomendamos visitarlo ya que es un lugar de exuberante belleza si os gusta ver nieve en invierno, y si preferís verlo lleno de colores de diferentes tonalidades o bien otoño o primavera serían una buena opción par realizar esta ruta.

Esperamos os haya gustado y os animamos a realizarla.

Por Marta Jarque, a 5-9-2018